La tierra manda- Poema de Miguel Longarini.

La tierra manda

A la tierra sedienta, le derramaron veneno.
Ella, sabia y antigua no podía gritar,
ni parar la sangría.
Pero talar el monte valía;
Convertirlo en desierto servía…
Alarmas de tragedias se proclaman
donde nadie escuchó qué decían.
Uno de esos días, los hombres,
con hambre de soja y dinero
marcharon con discursos encendidos,
banderas flameantes, patrios diferentes.
Pelearon por más ley o por menos, mucho no importaba.
Solo se trataba de ganar, No perder...
No se votó por la tierra, sino por más sed
en la tierra .
Dicen que el voto No positivo fue ponderado
por salvar la renta, por mostrar la fuerza…
Digo: que la tierra MANDA... aunque nadie lo crea.
Miguel Longarini

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